PILOTES Y MICROPILOTES
Los pilotes hincados son considerados estructuras enterradas que son capaces de resistir esfuerzos a flexión, estos son colocados dentro del suelo atravesando la superficie de falla. Esto quiere decir que trabajan empotradas en el suelo por debajo de la falla.
Esta técnica es utilizada en ocasiones para la estabilización de deslizamientos activos poco profundos debido a que los deslizamientos profundos producen fuerzas laterales muy grandes que no pueden ser resistidas fácilmente por este método. Para evitar que los pilotes se inclinen o desprendan, deben ser enterrados o hincados en un suelo firme competente y adicionalmente es muy común la utilización de la incorporación de estructuras de concreto armado para unir las cabezas de los pilotes para mejorar la rigidez y el comportamiento general del sistema.
Hay muchos casos donde la construcción de muros es difícil debido a la imposibilidad de realizar excavaciones previas a la construcción del muro en si. En estos casos la construcción de pilas perforadas de 1,00 a 2,00 m de diámetro unidas entre sí , resulta una solución muy efectiva. El Soil Nailing es un método de refuerzo in situ que utiliza micropilotes vacíos capaces de movilizar resistencia a la tensión en los casos donde ocurra un movimiento. La diferencia de los pilotes con respecto a los micropilotes es que este último no resiste cargas laterales a flexión. Los micropilotes son conformados por cabillas de acero, vigas, tubos o cables que se introducen dentro del suelo natural o la roca blanda y luego son inyectados en perforaciones previamente realizadas. Generalmente los micropilotes son espaciados a distancias relativamente pequeñas.
Entre las principales ventajas de los sistemas de pilotes y pilotines se tienen:
• Disponibilidad de los materiales que los conforman. • Disponibilidad de los equipos y maquinarias especializadas para su construcción. • El tiempo de construcción es considerado relativamente rápido. • Pueden construirse en sitios de difícil acceso. • Son sistemas eficientes como elemento de refuerzo en materiales fracturados o sueltos.